El payaso más triste el mundo

Lo vi la semana pasada en la caseta de San Martín. De frente su semblante era tristísimo, me dio pena tomarle la foto de frente; sólo lo vi y medio sonreí, él me dijo adiós con la mano. El resto del camino me estuve preguntando a dónde iría, si viviría en Puebla o en el DF, si alguien lo llevó antes de que comenzara la lluvia, si realmente se sentía tan triste como se veía, si su muñeco era lo único que tenía en el mundo.
Comentarios
bueno quizás sí, un payaso estresado...